"Nada podemos esperar sino de nosotros mismos" | SURda |
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04-05-2020 |
El Rol Imperial de la Organización Mundial de la Salud en la era digital
Silvio Amodei
¿Estamos en condiciones de juntarnos quienes vendemos nuestra fuerza de trabajo ya sea física o intelectual para analizar hacia dónde vamos como comunidad mundial o continuaremos aceptando que el miedo y el terror impuesto por esta nueva oligarquía mundial sea la condición a la que nos veremos sometidos en el siglo XXI?
Lo que parece ser no necesariamente es aquello que la realidad demuestra en los hechos. Trataré de plasmar algunas de las situaciones que a mi entender comienzan a delinearse en esta fase actual de la “pandemia” COVID 19.
Se asevera a través de los medios, que de ésta pandemia tenemos que “salir todos juntos”, ya que a todos nos golpea por igual. ¿Es verdadera ésta afirmación? Partamos de algunos datos que hoy por hoy vienen publicados desde los organismos internacionales, en algunos casos ellos mismos, los autores de la gran campaña de marketing terrorista y de desinformación publicitaria global.
Dice la OIT y lo reporta Página 12 el 8 de abril 2020: …”la destrucción de los puestos de trabajo será superior a la crisis financiera del 2008-2009”…más adelante agregan “… se calculan 195 millones de puestos de trabajo que se perderán”… “Guy Ryder Director General de la OIT afirma: “Ya no se trata de una crisis sanitaria, sino también de una importante crisis económica y del mercado laboral que está teniendo un enorme impacto en las personas“
Sin duda los miles de afectados por el Corona Virus son una cifra importante y lamentable, es también cierto que aún no sabemos cuáles son las cifras exactas de los fallecidos por causa del COVID 19 o de los fallecidos con COVID 19. La campaña de miedo y de terror en un primer momento se ha centrado en los afectados y las pérdidas humanas. Es a partir de estos momentos que comenzamos a pensar en las consecuencias sobre la economía y como ella nos afectará. No todos serán afectados de la misma manera. Las pérdidas de empleo, el aumento de la desocupación golpeara en forma mayor a todos aquellos que viven de su trabajo, sobre todo a los continentes donde ya la pobreza, indigencia y exclusión social es mayor, África, parte de Asia y América latina.
Dice Kristalina Georgieva directora gerente del FMI:” Ahora proyectamos que más de 170 países experimentaran un crecimiento negativo del ingreso per cápita”. Ambos organismos internacionales FMI y OIT sin tapujos y explícitamente nos advierten que aumentara la pobreza y los pobres e indigentes y que fundamentalmente los continentes mayormente explotados históricamente serán llamados a sostener y pagar el mayor costo económico y social.
Nada nuevo bajo el sol, solamente que en el reacomodo del capitalismo global se acentuaran más las diferencias sociales y económicas, por ende los conflictos sociales entre pobres y ricos y como consecuencia de ellos, será necesario un mayor control social y un aumento de la represión. Para controlar a los nuevos y viejos pobres es necesario vigilarlos a través de App, cámaras de seguridad, celulares etc. Además es imprescindible” llenarnos” de miedo hacia el “otro “(nuestro vecino, hermano o compañero de estudio o trabajo, etc.) el cual a través de este ensayo global digital ha sido colocado a una prudente “distancia social”
Tanto en lo económico, como con su correlato ideológico las grandes corporaciones globales digitales son la que de esta crisis llamada COVID 19 salen no solo reforzadas económicamente sino que a través de los tecnócratas de las organismos internacionales se han colocado y /o reforzado como los nuevos oligarcas mundiales. Por ende los gobiernos nacionales solo tendrán el mero rol de gestores de sus comarcas y de los súbditos modernos. Nada decidirán los gobernantes, solamente cumplirán meras funciones de gestoría, y enlaces con las grandes corporaciones y organismos mundiales.
A partir de esta crisis global la OMS ha lanzado una fuerte campaña de marketing sobre el COVID 19. Han determinado que es necesaria la cuarentena y el distanciamiento social. La sanidad a distancia es el nuevo caballito de batalla de la era digital. La OMS cuya sede central se encuentra en Ginebra- Suiza -(segundo país con mayor tasa de Coronavirus después de USA teniendo en cuenta la cantidad de habitantes) es financiada por los gobiernos y por donaciones de privados. No es difícil entonces suponer, que tanto las corporaciones farmacéuticas y laboratorios multinacionales sean los grandes financiadores de la OMS (1)
Poca transparencia e independencia puede tener por lo tanto la OMS para ser la garante de la salud mundial. La cadena SER en la WEB informa; “La financiación privada condiciona las decisiones de la OMS” según denuncia el Dr. G. Velázquez quien trabajo 20 años en la OMS. Por otro lado el Presidente Trump manifestó que la OMS, “parece estar muy sesgada hacia China” y por tanto le recortaría su financiación. A buen entendedor pocas palabras bastan.
Por otra parte las APP salen hoy muy fuertemente al mercado global. Actualmente el 65% de las APP están dirigidas al área de la salud, dieta y ejercicios. Su uso permite un acceso rápido a la información, y en el caso de la salud es posible convertirlas además en termómetros, electrocardiógrafo, glucómetro etc.
Las APP dirigidas tanto a médicos como a los pacientes tienen una enorme importancia para las casas farmacéuticas y laboratorios a nivel global. Tanto en el sistema de salud público cómo en el privado el médico utiliza la computadora para incorporar los datos y las informaciones de cada paciente. Con el utilizo de las APP es posible la medicina a distancia. Ello permite reducir las consultas además de bajar la hospitalización, y a su vez tendremos un mayor control del paciente-usuario. Por otro lado para llevar adelante esto es necesario la colaboración del médico, el cual recibirá en tiempos más rápidos todas las novedades que la industria del medicamento o de los insumos médicos le envía a través la App.
El mayor control sobre el paciente (donde va, con quien va, su estado de salud, sus deseos, etc.) y el control sobre el médico, nos muestra cómo todos vamos siendo llevados en tiempo real a ser consumidores controladores y controlados al mismo tiempo. Las APP serán productoras de contenidos y portadoras de publicidad tanto hacia el paciente como hacia el médico. Toda la información es mercancía segmentada, información de alto valor tanto para laboratorios, industria del medicamento, aseguradoras, insumos médicos, industria de la alimentación, industria del bienestar, etc.
Actualmente y según datos que se encuentran disponibles en la Web las App sobre salud son cerca de 97000, el 70 %corresponden a bienestar y deportes, mientras que el 30% restantes son para médicos y pacientes. Es probable que estas últimas aumenten su uso en el próximo periodo.
El rol de la OMS y de sus tecnócratas en esta crisis ha sido central en las políticas sanitarias que los gobiernos han adoptado para enfrentarla. Se ha brindado información sesgada e incompleta. En ningún momento hemos visto una información precisa sobre la cantidad de habitantes por km cuadrado y la cantidad de personas contagiadas, desconocemos globalmente si los fallecidos son por o con Coronavirus.
La digitalización en la sanidad, transporte, enseñanza, bancos, etc. ha llegado para quedarse.
La velocidad de la digitalización no debe ser subvalorada, su rapidez, su capacidad de modificación es continua y posee una mayor velocidad que nuestra capacidad de respuesta. Una nueva era de manipulación está llegando, renovándose en forma permanente, independientemente de nuestra voluntad u oposición. Quedamos sorprendidos, debemos eso sí, pensar en colectivo y comenzar a ponernos nuevos problemas y sus posibles soluciones. Esta nueva fase del capitalismo imperial, y el uso de la tecnología digital tienden a tener en el hoy un rol hegemónico y totalitario. La enseñanza es otro banco de prueba de la digitalización, sin dudas la brecha que se creara entre el excluido (fundamentalmente los pobres, quienes no lograran acceder a la enseñanza) y el integrado (quien podrá ir a escuelas y universidades privadas) generara un aumento de la exclusión social.
¿Estamos en condiciones de juntarnos quienes vendemos nuestra fuerza de trabajo ya sea física o intelectual para analizar hacia dónde vamos como comunidad mundial o continuaremos aceptando que el miedo y el terror impuesto por esta nueva oligarquía mundial sea la condición a la que nos veremos sometidos en el siglo XXI?
(1) Según información del Diario El país de Uruguay sábado 11 abril 2020 “La OMS ha fijado para el bienio 2020-21 un presupuesto de 5840 millones de dólares…” Más adelante agrega: “Buena parte de ese presupuesto (4883 millones de dólares) proviene de contribuciones voluntarias y solo 956.9 millones proceden de los estados miembros, de los que aproximadamente una octava (115.76 millones) parte serán sufragados por USA, aproximadamente el doble que su rival China.”
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